JAVIER ALZATE ZULUAGA

Médico austriaco, que abandonó la medicina tradicional y se dedicó a curar a los enfermos con hipnosis. Mesmer, realizó curaciones que podrían llamarse “milagrosas”, motivo por el cual su casa fue invadida por miles de personas de todas las clases sociales y procedentes de todos los lugares del mundo. Llegó a tal punto que no alcanzaba a atender a todos los que demandaban sus servicios, situación que lo llevó a ingeniarse un método que le permitiera atender masivamente a su multitudinaria clientela. Pacientes desahuciados, acudieron a él y sus curaciones fueron tan extraordinarias, que su fama se extendió por Europa y el mundo, lo que hizo que llegaran a Mesmer, más personas afligidas por quebrantos de salud.

Estudioso de Mesmer, años después de que éste abandona sus prácticas, se dedicó a la hipnosis en Francia. Al igual que su antecesor, fue famoso por las curaciones realizadas y en especial por la curación que logró en la persona de un joven llamado Víctor, que padecía una fuerte afección pulmonar. 

Victor, relata la historia, mostraba en estado hipnótico una asombrosa capacidad intelectual, parecía tener la capacidad de penetrar en la mente de los demás y leer sus pensamientos. La experiencia de Deypuségur, con el joven Víctor, fue considerada como un milagro; su fama al igual que la de Mesmer, se difundió por todas partes y centenares de personas acudieron a él. Su castillo se convirtió en el templo de alivio de los afligidos. Se sintió enaltecido y expresó: “ Estoy loco de contento del bien que hago”, cuando explicaba a la academia de medicina sus éxitos.

Sacerdote católico de la comunidad de los Jesuitas. Al mismo tiempo que Deypuségur era aclamado en Francia, el padre Gasner hacía furor, con la práctica de la hipnosis, en el sur de Alemania. Sus curaciones fueron también como las de los otros, espectaculares. Dícese que sus relatos tenían el colorido y la gloria de “Las Mil y Una Noches”.

Prominente cirujano de Mánchester. Profundizó en los estudios de la hipnosis, de tal manera, que fue considerado el padre del hipnotismo. A él se debe el término “hipnotismo” que se deriva del griego hypnus, que significa sueño. Realizó su exitosa actividad en Inglaterra.

Neurólogo muy famoso en su época, conocido como “El Gran Neurólogo”. Se sintió subyugado por los fenómenos de la hipnosis y decidió engrosar las filas de los experimentadores. Demostró conjuntamente con los alumnos de la academia, que existen varios grados de sueño hipnótico y que el sujeto hipnotizado puede manifestar síntomas cambiantes, en cada grado.

Médicos ilustres, abandonaron la medicina tradicional y se dedicaron a la HIPNOTERAPIA (tratamiento de las enfermedades a través del sueño hipnótico). Se dice de más de quince mil pacientes, tratados exitosamente con este medio. De Liébeault, se dice que tomó con tanto interés la hipnosis, que cuando le visitaba un paciente le ponía a escoger entre el tratamiento tradicional y el tratamiento con hipnosis, manifestándole que si elegía el primero, debía pagarle honorarios, pero si prefería el tratamiento hipnótico, lo haría completamente gratis. También relata la historia que éste ilustre experimentador, tuvo a una paciente hipnotizada en estado de analgesia total, durante 22 horas, en un trabajo de parto.

Padre del psicoanálisis. Utilizó la hipnosis para adentrarse en las profundidades del inconsciente de sus pacientes, como no lo logró con todos los que se propuso, prefirió abandonarla. No obstante haber sido compañero de Charcot y haber presenciado sus grandes éxitos.

Contemporáneo. Psiquiatra americano, autor de “Muchas Vidas Muchos Sabios”, “A Través del Tiempo”, “Lazos de Amor” y otros. Se hizo famoso con el tratamiento efectuado a Catherine, una ayudante de laboratorio, que sufría serios quebrantos de salud, tanto psicológicos como orgánicos.

Médico esteticista Pereirano (contemporáneo). Después de haber asistido a uno de mis cursos, realizó cinco intervenciones quirúrgicas (liposucción) en pacientes mujeres, con anestesia hipnótica.

Queda por mencionar centenares de investigadores, que han contribuido al buen nombre de la hipnosis, como instrumento terapéutico.